Parece ser que los antiguos egipcios creían que una vez muertos serian juzgados por los dioses por su conducta y sus actos en vida antes de decidir si habían de dirigirse al cielo o al infierno.
El método era simple, pesar su alma de un lado y una pluma del otro, si el alma era más ligera que la pluma eras afortunado, en caso contrario te esperaba el infierno.
De la misma forma creo que los dioses de la larga distancia juzgarán mi esfuerzo y mi deseo durante un largo día, y espero que pesen más que su unidad de medida, sea cual sea esta.
A ellos les pido que sean justos, nada más, la suerte aún necesaria, no tiene mucho que hacer aquí.
Les pido eso y sé, que una vez hecha mi petición solo escucharé los consejos de otro dios mucho más cercano a mi, ese que Sócrates llamaba su Daemon...
jueves, 2 de julio de 2009
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1 comentario:
Peazo de foto finisher! Felicidades Víctor! eres un campeón! >:D. MUA!
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