lunes, 18 de agosto de 2008

70.3 Wiesbaden 2008

4 kilómetros.

A bote pronto no es como para asustar a nadie, os lo concedo.

Sin embargo es esa distancia la que me separa de cruzar la línea, de acabar mi segundo Half y poner un final con imágenes a algo que he “visto” con anterioridad durante los meses de entreno precedentes.

En el penúltimo esfuerzo del día y atendiendo al más elemental de los principios del Cartesianismo – el de dividir un problema en partes más pequeñas para facilitar el análisis y solución de un problema – trato de digerir esos cuatro mil metros de la única forma posible.

1+1+1+1. Otra forma de decir lo mismo. En este momento, la única que me permite encajar la dificultad de algo tan sencillo como poner un pie delante de otro.

Y sin embargo es suficiente para lograrlo.1+1+1 de sufrimiento…y 1 de celebración.

Calculo en un bucle interminable que ritmo por Km. me separa de bajar de 6h30. Considerando mi historial matemático y mi estado físico actual resulta cuanto menos irónico, pero no tengo ganas de reír, aún no.

Los cálculos son correctos, se reducen a “no camines”.

4 kilómetros…

8 de la mañana. Me despido de Amy y Montse. Para ellas también es la recta final. Es curioso como ellas también sienten su parte de nervios o eso me parece a mí al menos.

Me enfundo el “traje de luces” y Juansi y yo vamos a saludar a Javi y Antonio, a desearles buena suerte y hacer las bromas de rigor previas a la salida.
Buena gente, nos fuimos conociendo en el aeropuerto (Antonio), Expo (Javi) y bus del bike check-in (Juansi) y no hemos dejado de cruzarnos estos días.

Es nuestro turno, nos dirigimos a la línea de salida, algo menos de 100 metros dentro del agua.

Empieza el baile. Me concentro en evitar los inevitables golpes y otras expresiones de “cariño” triatletico.

Como era de esperar, al poco tiempo la distancia revela la valía de cada uno en el agua y el grupo se estira, fin del modo “deathmatch” colectivo.

También de forma previsible empiezo a sentir la misma hartura de nadar que ya sentí el año pasado, probablemente debido al neo, con toda seguridad a causa de mi lentitud, pero la verdad es que este año han debido limpiar la piscina más veces de lo que yo he ido a nadar así que milagros a Lourdes, o a Pekín donde han habido unos cuantos en la piscina...

Fin del primer acto, escasos 43 min., 14 segundos por debajo del año pasado, podría haber ido mejor…de haber nadado en el ultimo mes y pico por ejemplo.

Transición genial para mi estándar, 3:28, casi dos minutos menos que el año pasado y mi único momento de “gloria” en cuanto a posición en mi grupo de edad (91). Y eso que el neo se ha puesto sentimental y no quería despegarse de mis pies.

Principio del segundo acto.

Sé que aquí se juega todo, mis mayores esperanzas de mejorar tiempo y en qué estado correré la media maratón. A mi favor, conocer el circuito y una mejor preparación en la bici este año. En contra, que el 99% de mis Km. en bici ha sido en rodillo, no del todo optimo para el manejo de la bici y menos cuando esperan bajadas muy rápidas y curvas cerradas.

Primeros 9 Km. llaneando, me acoplo al aero, cosa extraña porque hasta ahora nunca lo había hecho salvo alguna test esporádico. Esta vez ni lo dudo y para mi sorpresa me siento muy cómodo sobre él, es más, lo estoy disfrutando, mucho.

Primera subida larga, la velocidad esta lejos de ser impresionante, pero es superior a la del año pasado en todo momento.

Una voz familiar me hace sonreír y levantar la cabeza del manillar por un momento, bastante antes de coronar el primer puerto.

“Ese fistro de pecador […]”….es Juansi que me ha cazado sin mayores problemas, aunque no esperaba verlo ya desde la natación, pero supongo que es lo que tiene hacerse la pedicura en boxes y leer de cabo a rabo el Financial Times mientras los demás tratamos de arañar unos segundos al implacable crono, o eso o ha escrito la entrada del blog durante la prueba en vez de después… :-)

Lo acompaña Javi. En unos segundos nos juntamos un grupo de cuatro españoles (el otro estaba delante mío pero no lo sabia todavía) y, parodiando la película, “Con ellos llegó el cachondeo”.
Los alemanes nos miran con un poco de incredulidad, la verdad es que la subidita de marras no invita demasiado a la juerga, pero como lenguaje universal que es, la risa acaba contagiándose a nuestros anfitriones.

La grupeta (estamos subiendo para los que pongan el grito en el cielo por el drafting), no dura mucho, y pronto me quedo descolgado, ellos parecen subir con mucha alegría pero mi sentido del humor ha empezado la reducción de jornada unos Km. antes.

Primeras bajadas. Las pillo mejor, un solo susto en una curva y ni siquiera tiene que ver con la llovizna que empieza a caer, un segundo de despiste controlado in extremis.

Segunda bajada rápida.

Hay voluntarios y señales que nos avisan antes, pero me empecino en ganar segundos y sobretodo en ver como el “cuenta” sigue disparandose. Es excusable, por lo general él único otro contador que vigilo, el de mi cuenta bancaria, no para de bajar y no a menor ritmo, así que por una vez que veo como se acelera el primero…

Pero tanta codicia velocística no puede tener un happy end y para cuando quiero pillar esa curva cerrada la velocidad y el ángulo a los que entro son demasiado calculo para mi a pesar de haber frenado in extremis. Afortunadamente esta gente sabe organizar una carrera y han previsto protecciones de paja para los descerebrados de mi calaña.

Me preparo para testear las protecciones de la organización y doy fe de su eficacia, he conseguido reducir a algo menos de 30 por hora, pero obviamente no ha sido suficiente. Afortunadamente ni yo ni la bici nos hemos hecho nada, eso sí, la cadena ha saltado y no me he dado cuenta, de lo que seguramente me han estado avisando los voluntarios, pero yo solo repito “I’m OK” una y otra vez hasta que constato la evidencia.

Uno o dos minutos perdidos tal vez. Es igual, doy gracias por poder seguir en carrera.

Continua el recorrido, empiezo a sentir calambres en las piernas, de hecho poco más tarde los siento simultáneamente en ambos cuadriceps, lo cual me obliga a quitar desarrollo, es eso o la debacle a corto plazo no hay mucho donde escoger.

Una lástima porque lo peor ha pasado ya. En la subida más dura del año pasado recuerdo haber pensado “si esto dura 10 m más me bajo de la bici”, este año en cambio solo reconocí que era aquella subida poco antes de coronarla, y el sufrimiento no ha sido el mismo ni de lejos.

Ultima subida gradual, sé que me esperan algo menos de 10 Km. bajando a tope, buenas noticias para mis piernas.
Me dispongo a ganar - o recuperar si se prefiere - todo el tiempo posible.

Consigo acoplarme por momentos, superando el miedo a caerme. El resto del tiempo trato de bajar mi posición para ofrecer la menor resistencia al aire, nada evidente con mi físico, que se parece más a esos que corren en el hipódromo...no el jockey no, me refiero al caballo, al que corre de verdad.

Pese a todo record personal, velocidad máxima 74,6 Km. /h, y una sensación indescriptible hasta llegar a T2.

Llego prácticamente a la hora que indiqué a Amy y Montse, acoplado al aero y preparándome para el acto final. 21 Km. por delante.

Buena transición de nuevo, salgo de T2 con la firme intención de no caminar pase lo que pase.
En Banyoles acabé caminando en la última vuelta, pero eso me preparó para hoy.

Caer para volver a levantarse dicen.

Primera vuelta completada con lo que me parecen casi demasiado buenas piernas, luego mis tiempos me harán ver la realidad, pero en este momento las sensaciones son muy buenas, y solo la experiencia del año pasado me permite no echar las campanas al vuelo.
Vuelvo a ver al “fan club” y eso me recarga las pilas.

Pronto recogeré la primera pulsera. Ahí me pilla Antonio, al que veo muy bien, se está saliendo, le digo que siga que no baje el ritmo, esto es una carrera después de todo, no?

Segunda vuelta, aún queda algo en el depósito pero las reservas son escasas y sé que la última va a ser realmente dura.

En la tercera vuelta veo a un tío estirado en el suelo y 3 o 4 personas alrededor suyo, tratando de ayudarle, hundimiento?, rampas ? porqué escoger, probablemente las dos…

Se acerca la tercera pulsera, empiezo a ver el final del día, pero el sonido de una ambulancia me recuerda que esto no ha acabado todavía, sin duda alguien no se siente excesivamente bien…no se lo reprocho a estas alturas de la carrera.

Yo tampoco estoy en mi mejor momento ya.

Siento que la mirada empieza a perderse. Perderse en alguna parte entre mis continuos cálculos de ritmos, entre el “no camines” que no deja de sonar en mi cabeza una y otra vez, entre la rutina que me permite seguir avanzado y no tirarme al césped a contar tréboles, que ahora mismo me parecería una actividad de lo más lúdica, de no dormirme encima de ellos claro.

De alguna forma, sin duda no de la más rápida, he logrado acercarme al penúltimo Km., y empiezo a oír el griterío de la gente a la salida del parque. Subo algo el ritmo, tal vez solo me haya puesto más recto en realidad, es difícil de decir, ahora mismo tengo bastantes problemas con eso de la objetividad.

Ultimo Km., ahora sí subo algo el ritmo, aprovechando que el recorrido llanea hasta el final.

Últimos metros, un vistazo al crono y solo me quedan segundos para bajar de 6.30, depende de mi, de cuanto lo quiera.

Sprint final donde apenas pude trotar en 2007.

Amy está ahí animando a tope, la veo y aún quiero ir más de prisa, últimos metros de celebración…lo hemos logrado!

6:29:25, sensación de poder mejorar aún más y la certeza de saber que no habría sido posible sin el apoyo de Amy, los ánimos de Montse y la inspiración de Marco, cuya foto en el cuadro de la Cervelo me ha dado fuerzas y al que no he perdido de vista en toda la carrera, un beso para mi gordito...



7 comentarios:

Jam dijo...

Mi más sincera felicitación.
Supongo que es la mejor recompensa por mucho esfuerzo durante los últimos meses.

Jam

TortugaVeloz dijo...

Hola Jam,

Muchas gracias, sí ha valido la pena, un paso más en dirección de cumplir un sueño. Buena suerte para la media de Sabadell!

Juansi dijo...

Victor!!!!!!

Qué alegría!!!!!!

Mi crónica estará listo en menos que canta un gallo... tengo tantas cosas que contar que no sé por donde y cuando dejar de escribir :-)

Un abrazo para toda la familia!!!!!

Estás hecho un campeón!!!!!

Juankir dijo...

Me ha llegado al alma este trozo. Parece que hayas leído mi mente. Esto me ha ocurrido en mis dos únicos triatlones (Elche y Lanzarote)

Siento que la mirada empieza a perderse. Perderse en alguna parte entre mis continuos cálculos de ritmos, entre el “no camines” que no deja de sonar en mi cabeza una y otra vez, entre la rutina que me permite seguir avanzado y no tirarme al césped a contar tréboles

Buena carrera y buena crónica!!!

TortugaVeloz dijo...

Gracias Juankir, habiendo hecho Lanzarote no me extraña que hayas vivido las mismas sensaciones e incluso más, como todo finisher tienes mi total admiración! Un IM a la vista para 2009? tal vez nos veamos en alguno pronto. Saludos.

Juankir dijo...

iremos una gran comunidad alicantina al IM de Frankfurt. como verás hemos cogido algo más llanito jeje

por cierto, gracias por los piropos pero hicimos Lanzarote pero en plan quemalosoypordios, entrenando poco y mal. por algo somos trimalikos jaja

TortugaVeloz dijo...

Juankir, si lo llego a decir antes, ja,ja,ja...nos vemos en Frankfurt09 !!!, veo que entre vosotros y el amigo Juansi, el "lobby" alicantino está presente por doquier :-)
Finisher en Lanzarote son palabras mayores, sea cual sea el tiempo final! Lo repetimos en Frankfurt, fijo !